El edificio imposible de Zaha Hadid en Bakú

Zaragoza, 14 de Febrero de 2014

Mientras aquí nos permitimos tener completamente cerrado una joya de edificio de Zaha Hadid como es el Pabellón Puente, en otros lugares del mundo sigue construyendo y promocionando su espectacular arquitectura siendo centros de renombre internacional.

El edificio imposible de Zaha Hadid en Bakú

La arquitecta iraquí firma el centro cultural Heydar Aliyev de la capital de Azerbaiyán, un invento prodigioso de 57.000 metros cuadrados en el que no hay ni una línea recta. Por si fuera poco, todo tenía que ser blanco nuclear, símbolo de la independencia liderada por el político que da nombre al complejo.

Ni una sola línea recta. Y eso que, para darle a luz, se utilizaron 12.027 paneles desparramados a lo largo de más de 57.000 metros cuadrados. Pero la idea era que el invento, a base de triángulos, paralelogramos y trapecios siempre curvos, fluyera. Que se bambolease entre ondulaciones, olas y compañía envolviendo el paisaje. Que su piel, blanca inmaculada y maquinada a tiro de computación avanzada, fuese un retrato del «ciclo eterno», de la conexión entre el pasado, el presente y el futuro. Textual.

Al menos ése fue el encargo que recibió, en 2006, la arquitecta de origen iraquí Zaha Hadid (Premio Pritzer y Stirling) cuando ganó el concurso para levantar el centro cultural Heydar Aliyev en Bakú, la capital de Azerbaiyán. Objetivo directo: el edificio debía simbolizar los tiempos de renovación que atraviesa el país asiático. Si necesita más datos para situarlo, aquí van unos cuantos: su población es católica en su mayoría, pero oficialmente es un estado católico. Fue una república soviética durante más de 70 años, pero ahora se vende como una «democrática, de derecho y unitaria». Situada en el Caúcaso, entre sus vecinos están Rusia, Georgia, Turquía, Armenia e Irán.

Es decir, un cruce entre Europa y Asia que nada en petróleo, circula en BMW y exporta caviar por el que pasó, en su momento, la Ruta de la Seda. Y Marco Polo, Alejandro Dumas, Charles de Gaulle, Adolf Hitler… El actual presidente es, desde 2003, Ilham Aliyev, hijo del líder nacional y padre de la independencia del país de los rusos (1991) para cuyo homenaje se levantó el edificio homónimo que nos ocupa, Heydar Aliyev. No le falta ni eslógan: «Al futuro con valores».

El político se mantuvo en el poder durante más de 30 años, detallados minuciosamente en el museo biográfico que forma parte del edificio de Hadid. También se cuenta que, antes, ejerció de director de la KGB en Azerbaiyán y que firmó el llamado «Contrato del Siglo» con un consorcio europeo para extraer, muy beneficiosamente, el petróleo del país durante 30 años. El museo ocupa el espacio principal del complejo, que tardó en levantarse cinco años, de 2007 a 2012, para lo que hubo que desmantelar un barrio entero del centro de Bakú. Su inauguración, sin embargo, no llegó hasta hace apenas dos meses.

Entre los sectores revestidos en el exterior por Hadid a base de fibra de vidrio de hormigón armado reforzada con poliéster destacan las salas de exposiciones distribuidas a lo largo de nueve plantas, con una cafetería panorámica incluida. Ahí dentro uno puede toparse con una muestra de Andy Warhol, otra rebosante de los coches más flamantes (y caros) de los años 50, una tercera sobre los trajes folclóricos azeríes a lo largo de los siglos o una sesuda conferencia sobre el cosmos. Luego estaría la biblioteca y el auditorio, repartido en cuatro niveles y tan blanco nuclear como el resto de instalaciones. ¿El porqué? Ése es el color de la independencia nacional simbolizada por Aliyev.

| Más información. Centro cultural Heydar Aliyev. Heydar Aliyev prospekti, 1, Bakú, Azerbaiyán. Internet: heydaraliyevcenter.az. Precio de entrada: cinco manats (4,69 euros).

Fuente: http://www.ocholeguas.com/2014/01/23/asia/1390489179.html